La mente es un componente inmaterial del ser humano cuya función es percibir y comprender los objetos. Algunas personas piensan que la mente es el cerebro o en alguna otra parte o función del cuerpo, pero eso es incorrecto. El cerebro es un objeto físico que puede ser visto con los ojos y que puede ser fotografiado o intervenidos en cirugía. La mente, por el contrario, no es un objeto físico.
No puede ser visto con los ojos, ni puede ser fotografiado o reparado por la cirugía. El cerebro por tanto, no es la mente, sino simplemente una parte del cuerpo. Ello es porque la mente no tiene forma, o no tiene aspecto físico, por su naturaleza, no es obstruida por objetos físicos.
Nuestro cuerpo y alma son entidades diferentes, no hay nada dentro del cuerpo que pueda ser identificado como miembros de nuestra mente ya que nuestro cuerpo y mente son entidades diferentes. Por ejemplo, a veces, cuando nuestro cuerpo está quieto y tranquilo, nuestra mente puede estar muy ocupada. Esto indica que nuestro cuerpo y la mente no son la misma entidad.
Los niveles de la mente
Hay tres niveles de la consciencia: burda, sutil y muy sutil. En las mentes burdas incluyen las percepciones sensoriales, tales como: la percepción visual y la percepción auditiva, y todas las perturbaciones mentales intensas, como la ira, los celos, el apego y la ignorancia. Estas mentes burdas están relacionadas con los aires internos burdos y son relativamente fáciles de reconocer.
Cuando nos dormimos o morimos, nuestras mentes burdas se disuelven hacia el interior y nuestra mente sutil se pone de manifiesto. Las mentes sutiles están relacionadas con los aires internos y estas son más difíciles de reconocer que las mentes burdas. Durante el sueño profundo, y al final del proceso de la muerte, los aires internos se disuelven en nuestro interior cuerpo físico. La mente muy sutil está relacionada con el aire interno muy sutil y también es muy difícil de reconocer.
La continuidad de la consciencia mental es muy sutil no tiene principio ni fin. Esta es la cuenta que va de una vida a otra, y está completamente purificado por medio de la meditación, es esta mente que con el tiempo se transformará en la mente omnisciente de un Buda.